Hoy es un día especial,
es tu cumpleaños, hermana.
Y yo quiero que lo pases en grande,
que te diviertas y recibas muchos regalos.
Te quiero mucho, no solo porque
eres mi hermana, sino porque también
eres mi mejor amiga.
Crecí a tu lado y contigo aprendí
que la vida es maravillosa cuando
tenemos cerca a personas como tú.
Y me encanta saber que siempre
serás parte de mi vida,
que siempre te tendré cerca de mí.
Que Dios te bendiga con muchos
años de vida, que te permita ser
muy feliz y haga tus sueños realidad.
¡Feliz cumpleaños, hermana!
¡Feliz cumpleaños, papá! Que tu estés en este mundo y que seas mi papá es lo mejor que me podía pasar. Nadie ha hecho nunca tanto como tú has hecho por mi, valoro cada uno de tus esfuerzos por darme siempre lo mejor, has conseguido que crezca feliz y eso es lo más hermoso de la vida.
Hoy te quería dedicar en esta pequeña carta estas palabras sinceras, porque no siempre te digo todo lo que siento y todo lo que te agradezco. Gracias de verdad por apoyarme tanto y por ayudarme a ser quien hoy soy. ¡Eres el mejor!