Me diste la mejor vida que pudiste, y fuiste el mejor padre que podía tener. Te echo de menos cada día, y hoy más que nunca desearía que volvieses a vivir. Feliz cumpleaños.
Todos los días me acuerdo de ti, y llevo conmigo todo lo que me enseñaste, ojalá nunca te hubieras ido. Hoy te envío un abrazo al cielo, feliz cumpleaños, papá.
A veces sueño que regresas y vuelves para estar conmigo, después despierto y sé que es imposible, sea como sea hoy quiero decirte… ¡feliz cumpleaños, papá!