¡Feliz cumpleaños, hija mía! Son muchas las cosas que querría decirte hoy, tantas que no cabrían ni en mil cartas. Eres mi sol, la luz que todo lo alumbra, la alegría de mi vida, las respuestas a todos mis porqués, ¡no puedes imaginar cuanto te adoro!
Hoy haremos de este día el mejor de todos, será especial, mágico y no habrá otro igual. Estoy deseando ver tu linda cara cuando recibas todas las sorpresas que tengo para ti. ¡Te amo!
Hija mía, cuando te tuve por primera vez entre mis brazos supe que ese sería un momento que no olvidaría nunca, y así fue, hoy han pasado 6 años desde ese día y tengo un vivo recuerdo de todo lo que sentí. Puedo asegurarte que fue maravilloso y que nunca me había sentido tan bien.
Durante este tiempo hemos vivido miles de aprendizajes, y vendrán otros muchos más. Eres una niña hermosa y bondadosa, y siento un gran orgullo por ti. ¡Feliz cumpleaños!
Tienes una forma de hacer que el mundo sea mucho más bonito, hija. Creo que ya te lo había comentado, pero cada día me doy cuenta de lo afortunado que soy por el simple hecho de tenerte.
Admiro mucho tu valentía al emprender nuevos retos, tu corazón bondadoso y el hecho de que siempre estés disponible para ayudar al que más lo necesita.
El día de hoy es motivo de orgullo porque estás llegando a los 15 años, hija mía. Para mi es emocionante verte alcanzar esta edad, haberte acompañado desde que eras un bebé, y ver como ahora vas dejando atrás la niñez.
Quería escribirte estas palabras para que sientas todo mi amor y también mi admiración por ti. Debes saber que hagas lo que hagas, siempre me tendrás aquí para acompañarte y aconsejarte. ¡Feliz cumpleaños!
Desde que te vi supe que te amaría con todas mis fuerzas ¡Feliz cumpleaños, hija! Hace dos años llegaste y te convertiste en el arcoíris de nuestro hogar. Eres una niña carismática, inteligente y cariñosa. ¡Espero siempre seas así!
Deseo que soples las velitas con mucha fuerza, y todos tus deseos se hagan realidad. ¡Te quiero inmenso!
Cuando naciste no sabía todo lo que suponía tener una hija, pero rápidamente me di cuenta, y tú me enseñabas lo que significaba, cada día. Con tu mirada y tus gestos, con el paso del tiempo, y con la alegría que desprendías no tarde en darme cuenta de que eras lo más maravilloso de mi vida.
Me has enseñado mucho desde que llegaste al mundo, mucho más de lo que yo te haya podido enseñar. Aunque seas mi hija más mayor, eres y siempre serás mi pequeña.
Hoy estás cumpliendo años y me emociono de mirarte tan crecida, tan valiente y tan buena persona. Siempre tienes una sonrisa y no sé como lo haces, pero consigues alegrarme hasta en el peor día. Quiero que sepas que te admiro profundamente. ¡Feliz cumpleaños, hija mía!
Mi hija ya llegó a los 18 años y eso es motivo de celebración, de estar felices y de disfrutar. Quien me iba a decir, que el tiempo pasaba así, parece que de la noche a la mañana, mi hija pequeña se convirtió en mujer, aún recuerdo cuando intentaba decir sus primeras palabras, o dar sus primeros pasitos, ¡y hoy ya es una persona adulta!
Desde que naciste, me robaste el corazón, pues fue mirarte y sentir que cuidaría de ti para siempre. Por ello, aunque siempre querré que seas independiente y debes saber que estaré para ti, apoyándote en todo lo que me pidas. ¡Feliz cumpleaños!
¡Feliz cumpleaños, hija! Ya eres una persona adulta, lo demuestras con cada paso que das, y no sabes el orgullo que yo siento de verte así, tan hermosa y tan feliz en el camino que decidiste elegir.
Espero que hoy sea para ti inolvidable, que soples las velas con el entusiasmo de cuando eras una niña, como, en verdad, haces cada año que pasa.
Yo estaré junto a ti para darte un gran abrazo y mucho cariño.
Mi hija ya con sus 10 años recién estrenados y yo con mi sonrisa que no me la quita nadie. Hoy es un día para pasarla bien, para estar felices por lo que la vida nos regaló, porque creces alegre, con muchos amigos y amigas que te quieren, y con nosotros y el resto de la familia, que te amamos y que siempre estaremos aquí para, cuidarte, protegerte y para aquello que necesites.
No olvides que eres mi niña preferida, ¡feliz cumpleaños, hija!
Sé que para cada padre su hija es la más hermosa, ¡Pero la mía es perfecta! ¡Hermosa, divertida, inteligente y cariñosa! ¡Te amo, hija! Quiero celebrar este cuarto cumpleaños y que te sientas como una princesa en un cuento de hadas.
¡Feliz cumpleaños! Que Dios siempre te bendiga con salud que es lo más importante, y del resto nos encargaremos nosotros.
¡Feliz cumpleaños, hija! Hoy llegas a los 6 años de vida, te miro y solo puedo pensar en que me encanta la personita en el que te estás convirtiendo, siempre con ganas de aprender y de descubrir cosas nuevas. La curiosidad y la ilusión es algo que te caracteriza, y deseo que nunca lo pierdas, pues te hace ser como eres.
Comienzas una edad apasionante y da gusto estar contigo, pues se nota que vas haciéndote mayor. Hemos estado días hablando sobre tu cumpleaños, sobre las ganas que tenías de que llegase, sobre que íbamos a hacer y que no, sobre los invitados e invitadas… Y por fin ha llegado y ya está todo preparado, solo queda que disfrutes mucho y que seas muy feliz.
Yo me encargaré de darte mucho cariño, ¡te amo, mi niña!
Hija hermosa, desde el momento que te tuve por primera vez en mis brazos, juré protegerte y velar por tu bienestar siempre, pero hoy admito que te has convertido en una mujer fuerte, astuta e inteligente que no necesita mi protección en lo absoluto.
Sin embargo, quiero que sepas que siempre estaré aquí para lo que sea, pues sé que aunque muy poco lo demuestres sigues siendo mi pequeña flor, frágil, delicada y brillante con unos sentimientos que valen oro, y una sonrisa que derrite de amor a todo aquel que tiene la oportunidad de verla.
¡Feliz cumpleaños, hijita mía! Te amo desde lo más profundo de mi corazón y confieso que me duele ver lo rápido que creciste, pero me alegro de ver la persona tan maravillosa que eres.
Hija mía, contigo llegó a casa la alegría, que es infinita. Hoy celebramos ese momento con una sonrisa en nuestro rostro, sabiendo que tu llegada fue lo mejor que nos pudo pasar.
Recibes un año más para brillar, para seguir aprendiendo, creciendo, saltando, descubriendo, dando pequeños pasitos en esta vida que haremos que sea la más feliz de todas.
Debes saber que tus papás te amamos con locura y que estamos aquí para cuidar de ti. Gracias por regalarnos tantas sonrisas. ¡Feliz cumpleaños!