¡El amor verdadero lo conocí cuando te vi, hija! ¡Felicidades por tu segundo cumpleaños! Eres mi florecita que con el paso de los días se va haciendo más grande y más hermosa. Deseo que tu vida siempre sea feliz y rodeada de todos los que más te amamos.
Hoy tengo unas palabras para compartir, porque estoy muy feliz, festejando por el cumpleaños más importante de todos, ¡el de mi querida hija!
Eres sinónimo de vida, de luz, de esperanza y de alegría, tu llegada fue mágica así como lo fueron todos los días desde que naciste, desde que te tuve por primera vez en mis brazos.
Hija, ¿Cómo no sentir emoción si hoy es tu cumpleaños? Un día como hoy iluminaste nuestras vidas, y pido para que lo continúes haciendo por muchos años más.
¡Feliz cumpleaños, mi hija linda! Espero que hoy hayas despertado con una sonrisa en la boca y sintiéndote muy bien por recibir una nueva edad, ¡y porque te espera un día de alegría y de fiesta!
Yo ya estoy esperándote para darte un gran abrazo, para compartir contigo algunas horas del día, para que puedas recibir mi amor, mi cariño y un hermoso regalo que tengo para ti. ¡Que pases otro año más muy feliz y que en cada decisión que te acompañe la suerte!
Tu nacimiento lo supuso todo para mi, y es lo que recuerdo este día. No olvides que por muy lejos que estemos, te quiero más que a mi vida. ¡Feliz cumpleaños, hija!
Nuestra niña, la que un día fue la pequeña de la casa, ha dejado de serlo, ¡pues hoy cumple 18 años!
Hija, lo más importante para mi en esta vida, desde que naciste, fue que crecieras feliz y que te sintieses querida y protegida.
En eso invertí todos mis esfuerzos, y creo que dieron resultados, te has convertido en una persona maravillosa, alguien a quien admiro. ¡Feliz cumpleaños!
¡Feliz cumpleaños, hija! Ser tu mamá lo significa todo para mi, lo más hermoso que me ocurrió, la felicidad diaria de verte crecer, de verte emprender nuevos proyectos con ilusión, acompañarte, cuidarte…
Espero que hoy pases el mejor de los días, que recuerdes la alegría que te daba cuando eras chiquita y llegaba este día. Adoro verte cumplir un año más, pero, sobre todo, ver como pasito a pasito te vas convirtiendo en una mujer fuerte, segura de si misma y con grandes valores. ¡Te amo!
Hijita mía, que Dios acompañe cada uno de tus pasos en esta nueva etapa que empiezas a recorrer, y que te bendiga todos los días de tu vida para que todo salga tal y como lo planees.
Hace 15 años te vi por primera vez siendo una bebe indefensa, pequeña y delicada, hoy, me doy cuenta de lo hermosa que eres, hija de mi vida, y de lo mucho que has crecido en tan poco tiempo.
¡Feliz cumpleaños, princesa! Que cada vez aumente aún más toda la felicidad que siempre tienes, y que el amor y la sabiduría te sean abundantes por el resto de la vida.
¡Te quiero muchísimo, y espero que estos 15 años estén acordes con lo que siempre imaginaste!