¡Feliz cumpleaños, sobrino! Eras un niño tan chiquito… y como si fuese de un día para otro… ¡ya eres un quinceañero!, ¡y es que es una alegría verte tan hermoso! Sabes que tienes mucho por vivir, y espero que sepas disfrutarlo, que el día de hoy te traiga lo mejor, y que así sea también el resto del año.
¡Muchas felicidades, sobrino! Seguro estarás emocionado pues ya eres quinceañero, y dejas poco a poco parte tu parte de niño atrás para madurar. Como en ocasiones te digo, la vida no es más que un camino, y lo mejor para vivirla es tomar las mejores decisiones, las que nos llenen el corazón.
Deseo que vayas eligiendo tu propio camino, y que, si en ocasiones te parece difícil, que sepas que me tienes aquí para darte consejo. ¡Te adoro!
Desde que llegaste con esos ojos enamoradizos, supe cuanto cariño te tendría, sobrino. Espero que este día sea tan feliz para ti como lo es para mi, y que te mantengas tan caballeroso como siempre. ¡Te quiero mucho! ¡Nunca cambies!
Con tanta tecnología, es imposible no felicitarte en tu día, sobrino. A pesar de la distancia, ¡Quiero que la pases genial, y pronto vengas a visitarnos!