Abuela, usted fue quien se ocupó de mi siempre, nadie me cuidó tanto y tan bien, y ojalá pueda sentir cuanto la quiero y cuanto se lo agradezco. ¡Feliz cumpleaños!
Hoy llega mi día de cumpleaños y tengo muy claro que este año que comienza para mi estará marcado por la alegría, y por la calma. Son muchos los caminos que puedo elegir, pero solo tomaré uno de ellos, y será el que me lleve a conseguir paz de espíritu. ¡Así, recibo esté día con mucha ilusión y con las esperanzas de que todo irá a mejor!
Siempre estuviste feliz de ser el hermano mayor y a mi me alegra mucho que fuese así. ¡Feliz cumpleaños, hijo! Gracias por toda la ayuda durante todos estos años, se que muchas veces no era tu responsabilidad, y que tuviste que crecer rápido para poderme ayudar.
Cuando llegue el momento vas a ser un excelente papá, y yo estaré presente para ayudarte siempre que lo necesites. ¡Te quiero mucho!
Este año he decidido celebrar tu cumpleaños de una forma diferente, mamá. No quiero darte un regalo superficial, simplemente expresarte por aquí mis sentimientos, ¡Y tengo la seguridad de que te va a gustar más que cualquier cosa!
Lo primero que quiero que sepas es que eres la mamá más perfecta que me pudo haber tocado, ¡Y le agradezco todos los días a Dios por eso!
A lo largo de la vida me has enseñado a ser valiente, a aventurarme a lo desconocido, a aprender todo lo que pueda, y a ser una persona honesta. Todo eso me hace la persona exitosa que soy hoy ¡Te lo agradezco mucho! ¡Te amo, mamá! ¡Le pido a Dios que siempre estés conmigo!
En mi cumpleaños, siempre me gusta ver a las personas que más admiro y que más quiero, pues son las que mejor me hacen sentir, de las que más aprendo, y las que más ganas de vivir me dan. Por ello, hoy estaré con ellas, y sé que sentiré una felicidad plena.
“Que el Señor te bendiga y te proteja, que el Señor sonría sobre ti y sea compasivo contigo, que el Señor te de su paz”. (Número 6:24-26)
Que en este que es tu día seas feliz, que lo festejes y que compartas con todos aquellos que sean importantes para ti. Mereces que te pase lo mejor, por mi parte sabes que estoy aquí para ayudar en lo necesario.
Que Dios te bendiga en este día y en todos los que le siguen, de corazón te envío mis mejores deseos para la celebración, un grande abrazo, y un ¡feliz cumpleaños!
Hija, estás en el comienzo de la vida, vienen miles de aventuras por vivir, y yo siempre estaré a tu lado, ¡acompañándote en todo aquello que necesites! Hoy cumples 3 añitos, y es un día hermoso, pues estás llena de vida, siempre atenta y sonriente. ¡Muchas felicidades!
¡Feliz aniversario, mi amor! Que hoy festejamos y brindemos por todo lo que hemos pasado juntos, por nuestro amor inmenso como el océano y por la suerte de habernos encontrado en esta linda vida.
En estos dos años juntos he reído como nunca lo había hecho, he podido sentir tu amor cada día, y he aprendido más que en toda mi vida. Compartir contigo es hermoso, haberme enamorado de ti lo mejor que me podía haber pasado y festejar por este maravilloso día es un regalo. ¡Feliz aniversario, mi amor!
Eres mi ahijada y la persona con la que tengo más confianza es por eso que este año no solo quiero desearte un feliz cumpleaños, sino también, explicarte las razones por las que me enorgullezco de que seas mi ahijada.
La primera es porque desde el primer día en que naciste, tú y yo tuvimos una conexión mágica. Te gustaba estar en mis brazos y te dormías rápidamente. ¡Eso me hacía sentir especial!
Ya siendo más grande me hacías reír con tus ocurrencias, y me encantaba saber que siempre que tenías un problema querías tener mi opinión.
Y finalmente porque tienes un corazón de oro. ¡Eres la niña más noble que conozco! Tu preocupación por los demás me hace saber serás una gran mujer. ¡Feliz cumpleaños, ahijada amada!
¡No existe un mejor hermanito que el mío! Es por eso que no solo celebro tu día, sino cada momento que hemos vivido juntos. ¡Cada vez que te veo cumplir un objetivo me emociono como si fuera mío!
Te deseo muchísima salud, y que sigamos siendo siempre tan unidos. ¡Muchas felicidades!
¡Muchas felicidades, hijo! Quiero que sepas que hoy haré lo posible por salir de trabajar antes para poder recibir contigo tus 3 añitos, porque quiero que recuerdes para siempre que tu papá estaba a tu lado festejando por tu cumpleaños.
Lo eres todo para mi, la luz que lo ilumina todo, y estoy muy orgulloso. Sé que eres un buen niño y sobretodo sé que eres feliz y eso es lo más importante y por lo que siempre lucharé para ti.
Tengo que decirte que yo hoy no te he comprado ningún regalo, pues una vez te oí decir que para ti lo más importante era tener salud, alegría, y buena compañía. Salud ya tienes, y yo soy una persona muy alegre que estaré todo el día a tu lado ofreciéndote la mejor compañía. ¡Felices 18 años!