Amiga, yo no sé qué sería de mí

Amiga, yo no sé qué sería de mí y de mis días si no me hubiera cruzado contigo, si no hubiera tenido la suerte de conocerte. En este día de cumpleaños, quiero darte gracias por las risas, pero también por los llantos, que nos hicieron crecer, estar más unidas y ser personas más fuertes.

Sé que a día de hoy somos inseparables y eso no tiene precio, eso es lo más lindo que me podía haber pasado en esta vida. Te quiero muchísimo. ¡Muchas felicidades!