Que sepas que tu mamá está feliz

¡Muchas felicidades, hija mía! Ya te he dicho millones de veces cuanto te amo, pero es que no puedo evitarlo, y mucho menos en el día de tu cumpleaños. Mi niña que no para de crecer, casi eres ya toda una mujer, cada vez más valiente e independiente.

Aunque me de un poco de tristeza que dejes de ser mi niña pequeña, también me da orgullo y alegría verte tan madura y tan crecida. Que sepas que tu mamá está feliz de verte caminar y tomar decisiones que te hacen feliz.