Recién me doy cuenta

Recién me doy cuenta que todos estos años se me han pasado en un abrir y cerrar de ojos, ¿Cómo es posible que estés cumpliendo 18? Me parece que hace unos días venías a pedirme que te cargara. 

Espero sepas que como tu madre siempre estaré pendiente de ti y que incluso si tienes 18, 30, o 50, mi vida siempre girará entorno a tu bienestar y felicidad. ¡Espero consentirte como te lo mereces! ¡Feliz cumpleaños, hija adorada!