Mucho aprendí de ti, madrastra

Hoy quiero celebrar junto a ti este día tan especial, madrastra. ¡Felicidades por un año más! Imagino lo difícil que fue para ti educarme, y tratar de tomar las mejores decisiones para que tuviese un mejor futuro, sin ser mi madre. ¡Quiero decirte que lo hiciste perfecto! Y que te considero una segunda madre.

Espero tu vida sea siempre feliz y llena de muchas bendiciones. Hoy desde que despiertes espero tu día este repleto de sorpresas y mucho amor de todos los que te queremos.

Quiero que la vida se encargue de devolverte todo lo bueno que tú nos has dado a lo largo de todo este tiempo, y que te sientas muy orgullosa de la persona que soy hoy. Recuerda que mucho de lo que hoy sé, lo aprendí de ti.

¡Te quiero mucho y espero pases un feliz cumpleaños!