La misma mirada bondadosa de siempre

¡Feliz cumpleaños, papá! No paran de pasar años y tú sigues siendo un hombre apuesto, divertido y muy simpático. Me alegra mucho que no pierdas tu alegría por mucho que pase el tiempo y que tengas la misma mirada bondadosa de siempre.

Gracias de verdad por enseñarme tanto, por ayudarme a encontrar mi camino en la vida y por estar siempre disponible para darme tus consejos. ¡Te quiero mucho!