La felicidad que siento hoy por ti, mi pequeño sobrino

El amor y la felicidad que siento hoy por ti, mi pequeño sobrino, no pueden calcularse pues son infinitos. Un añito de vida y en él han pasado las cosas más maravillosas, como tenerte por primera vez en mis brazos, mirarte dormir, jugar y reír.

A veces pienso como es posible que una persona tan pequeñita sea capaz de dar tanto, de demostrar tanto amor, y de transmitir tanta alegría. Le doy gracias a Dios porque estás aquí y deseo que sigas creciendo con mucha salud y grandes sonrisas. ¡Feliz cumpleaños!