Hoy miro al cielo y te recuerdo

Hoy miro al cielo y te recuerdo, mamá, ¡Feliz cumpleaños! Sé que estas en el cielo y que eres un ángel que siempre va a cuidarme, pero es imposible no extrañarte. Como quisiera que bajaras del cielo y hablaras conmigo por un rato, como hacíamos todos los días.

Siempre te voy a recordar como la mujer perfecta y amorosa, guiándonos, enseñándonos a ser mejores personas e impulsándonos a cumplir todos nuestros sueños.

Desde que te fuiste entendí que me harían falta tus consejos, tus abrazos, y tu apoyo en los momentos difíciles de mi vida. A veces pienso que debería haberte valorado más, pues hoy que no te tengo sé que perdí el más preciado tesoro que Dios me pudo dar. Quiero que sepas, mamá, que te tengo siempre en mi pensamiento y en mi corazón.