Estuviste en el vientre de otra madre

Hijo mío, estuviste en el vientre de otra madre, pero Dios tenía todo planeado para que te encontráramos y juntos formáramos el hogar que siempre deseamos.

Desde que te vi sentí un amor inexplicable por ti, era como si siempre hubiese sabido que tu llegarías a mi vida. ¡No hizo falta que pensara en la decisión! ¡Quería que fueses mi hijo!

Me dediqué a amarte, cuidarte y enseñarte a ser un hombrecito de bien. Hoy me siento la persona más orgullosa y que todo valió la pena. ¡Eres lo mejor que me ha pasado!

No hace falta que te diga lo mucho que te adoro porque sé que lo sabes desde hace mucho tiempo, pero sí que sepas cuanto deseo estar aquí para poderte ver realizar todos tus sueños. ¡Feliz cumpleaños, al mejor hijo!