Desde el minuto en que supe que te tendría

¡Feliz cumpleaños, hijo! ¡Te amo tanto! Desde el minuto en que supe que te tendría, y en que mi vida cambio por completo. Todo fue diferente cuando tú naciste, y yo me sentí plenamente feliz.

Con cada año que has ido cumpliendo, has ido haciendo grandes cambios, que te han ido llevando por un camino hermoso que espero que sigas disfrutando por mucho tiempo. Que puedas alcanzar todos los sueños que tienes para este año y que yo siga viéndolo.