Me aconsejas todos los días

Querida tía, hoy me desperté dándole gracias al Señor por regalarme un ser tan especial y espectacular para que me rodee y me aconseje todos los días de mi vida.

También te agradezco a ti por nunca abandonarme, y siempre tenerme en cuenta ante todo. Hoy, lo único que espero es que tengas un cumpleaños muy feliz que te llene el corazón. Una vez más feliz cumple, tía amada.